Narcotráfico y Terrorismo.

No suelo publicar mucho sobre estos temas, porque son polémicos y pueden afectar a las personas. Pero creo que con la actual situación, lo amerita.

He leído en varias redes sociales (especialmente en Facebook), que es una hipocresía el hecho de que como mexicanos nos indignemos sobre los recientes atentados a París, que somos unos malinchistas, que tenemos una doble moral por pensar de esa manera…

Pero ¿porqué intentar menospreciar este acontecimiento? Entiendo que probablemente, la cifra de muertos que sufrió Francia es la misma que tiene México a diario (me arriesgaría a decir que incluso son más), pero al final las circunstancias de su muerte son distintas. 

En el Narcotráfico las muertes por lo general son ajustes de cuentas, fuego cruzado al defender su territorio o pelearlo. De igual manera, hay personas que eran inocentes y lamentablemente les tocó estar en el lugar y momento equivocados.

En cambio,  el terrorismo son actos que van en contra de la población, con el fin de causar miedo. Con el fin de azuzar al gobierno y demostrar quién tiene más poderío. 

Y ambos actos son igual de reprobables. 

Ahora bien, hay una facción que proclama: «Eso pasa a diario en México con el Narcotráfico. Deberían de indignarse también por todas esas muertes. Por los casos no resueltos de Ayotzinapa, de Tlatlaya, de Guerrero, Tamaulipas, Jalisco, Sinaloa, etc.»

Pero yo digo, sí, son lamentables esas muertes. Toda muerte es lamentable. Y ninguna es justa. Pero ¿qué podemos hacer nosotros cuando es el propio gobierno quien perpetra estos actos hacia su propio pueblo? No podemos dar un golpe de estado, la sociedad es demasiado apática para siquiera planteárselo. No puedes decir: «Todo cambiará con las elecciones» porque, para empezar, la democracia es la falacia mejor escrita y vendida por los medios. La democracia en países tercermundistas como México no sirve. No importa lo mucho que te digan lo contrario. Mientras la población no esté educada, no habrá un verdadero cambio y podrán seguir comprando los votos en base al populismo. La población no tiene los parámetros para poder decidir sobre sus gobernantes porque no hay educación, al no haber educación, no pueden formarse un criterio, luego entonces, las elecciones y la democracia son inservibles. 

Siendo sinceros (y por mucho que me pese decirlo) México ha sido un país que ha tenido todo, TODO para ser potencia e incluso, para desbancar a algunos países que están en el G8. Es la Décimo cuarta economía en el mundo, es un país mega diverso y casi un cuarto de la flora y fauna del planeta le pertenecen, tiene abundantes pozos petrolíferos, es el primer productor de plata y otros minerales a nivel mundial, sus condiciones climáticas son excepcionales para poder plantar casi cualquier fruto o vegetal existente en el mundo…

Y, en cambio, solo le producimos mano de obra barata a Estados Unidos e incluso peleamos con China por lo mismo.

Por lo que, regresando al tema principal, el Narcotráfico no puede compararse con el Terrorismo. Hay una línea muy delgada que les divide, pero la diferencia es enorme.

La dinámica del narcotráfico es meramente económica, y es una red mundial de conexiones. En la cual, en el caso mexicano involucra a EEUU, Guatemala, Argentina, Colombia, Perú, Bolivia, Marruecos, Paquistán, Australia, España, quizá Brasil, entre otros.

Así que no solo es un problema de México, sino es un problema continental en donde todos los involucrados deben trabajar juntos. México solo, nunca va a poder resolverlo, no importa lo muy bajo que sea el consumo en el país, porque al ser una de las principales rutas, la tiene muy difícil si es que quiere trabajar de esa manera.

Se puede controlar el narcotráfico para evitar muertes (esto lo hacía el PRI durante toda su dictadura el siglo pasado), pero no se puede derrumbar, al menos en un corto plazo.

Sobre el Estado Islamico, estos últimos tienen bases ideológicas. Tienen un enemigo declarado, que es Occidente, y esto, quieran o no, nos afecta a todos los que vivimos en el Continente Americano. Su visión es restaurar un Califato con la Ley Sharia con las históricas tierras que estuvieron bajo el control de los musulmanes. Además, su meta es instaurar el Islam como religión global.

El ataque de ellos a Francia es algo que hay que tomar en cuenta, porque no fue solamente un ataque a París, fue un ataque a todo el Mundo Occidental. Y eso, como saben, nos incluye a nosotros. 

Esto va más allá de religiones, esto tiene que ver con nuestra forma de vida, con nuestras libertades.

Cristianos, ateos, judíos, agnósticos, izquierdistas, derechistas; incluso para los que comemos cerdo, los que gustamos del tabaco, el alcohol, los que se afeitan (porque el Islam prohíbe afeitarse, el alcohol y decapita a los fumadores).

Yo no voy a esperar hasta que el Estado Islamico llegue a México y quieran instaurar un califato en este lugar. En este país que es laico.

Y no, mostrar esta postura no es ser intolerante. Simplemente estas enumerando los hechos y las consecuencias de una falta de acción de quienes provocaron en primer lugar todo este conflicto.
…Y así, les muestro una pequeña parte de mi pensamiento. Cada quien tiene su propia postura y criterio. Con esto no quiero promover la «Islamofobia» o la xenofobia (deberían saber que bastante tenemos de eso en México), simplemente, me gusta que las personas tomen consciencia y se formen su propio criterio.

Divagues.

Mi mente es un desorden. Siempre lo ha sido. En un día aprendo muchas cosas y en otro olvido varias. Debería avergonzarme. Pero no lo hace. Al contrario, me hace darme cuenta de cuan humana soy. De cuan insignificante y efímera es mi presencia en este mundo. 

La raza humana son como niños. Tratando de aprender lo mas que puedan en un corto espacio de tiempo, tratando de dejar huella de su paso, tratando de aniquilarse los unos a los otros. 

Siempre me pregunto cosas. Siempre imagino mundos utópicos y algunas veces, la distopía me aturde. Busco respuestas en cosas pequeñas, tales como la lluvia, los rayos de sol, los charcos de agua, las manchas en mis zapatos. Busco todo y no encuentro nada. 

Todo el tiempo me siento miserable. Pero es este tipo de miseria que no sabes que esta ahí. Es el tipo de miseria con que convives a diario. El tipo de miseria que te consume lentamente, que te quita la motivación, que hace que todo se vea oscuro. Ese tipo de miseria es con la que vivo. 

No me satisface nada. En un momento amo a la humanidad y al siguiente la odio. La odio por su egoísmo y frivolidad. La odio por sus dobles estándares y doble moral. La odio por proclamarse defensora de los derechos humanos y al instante siguiente, declararle la guerra a criaturas que no podrán defenderse. 

¿Ya había dicho que mi mente es un desorden? Pues bien, aquí está la prueba.

Curiosidad.

Me da curiosidad la naturaleza humana. No tiene nada que ver con las preguntas filosóficas que muchos ya se han planteado y auto-respondido.

Porque ya hay muchos autores hablando sobre ello y refutando las teorías de sus antecesores. Tiene que ver con el fenómeno que es el ser humano. El principio mismo de la ciencia es que algo ocurrió y la vida surgió y ella se encarga de dilucidar que fue ese «algo» que ocurrió. La filosofía se pregunta por el hombre y su destino. La psicología se encarga de estudiar los procesos mentales y nuestra conducta.

Pero… ¿Y que pasa si juntamos estas tres disciplinas? ¿Son tan incompatibles como nos han hecho creer? Yo no lo pienso así.

Deberíamos saber que el hombre mismo se encargó de etiquetar cada cosa de manera cuidadosa para su propio entendimiento y conveniencia. Y aquellos que se atreven a cuestionarla son una anomalía estadística. Un error de cálculo. No tiene porque ser así.

Me da curiosidad la naturaleza humana porque creo que sus sentimientos «negativos» son los más reales. Los más sinceros en esta hipocresía que se volvió la sociedad. Creo esto porque vienen de nuestros instintos primarios, nuestro lado salvaje que ocultamos en reglas y normas que seguimos sin cuestionar. ¿Porqué preocuparse por las normas morales y las éticas? ¿Porqué preocuparse por ellas, sí quien te las enseña es el primero en romperlas? No le encuentro sentido. No lo encuentro.

Por eso odió el ser y el deber ser. Porque la primera es lo que debes de ocultar y la segunda es una potencia inacabada e irrealista. Todo esta sociedad y su contexto es una utopía.

Mi Primera Vez.

Esta es mi primera vez aquí, así que debería de escribir algo interesante.

Pues bien, tengo 19 años y estudio la Universidad. No pondré en donde nací (dudo que a alguien le interese saber que nací en un Estado del Sur de México), ni tampoco en donde crecí (dudo aún más que a alguien le interese saber que la Ciudad de México fue mi patio de recreo).

No me gustan los traidores y los hipócritas. No me gustan las personas que no pueden creer en sus propios principios.

Siempre me cuestiono muchas cosas y siempre termina mal para mi, porque no puedo hacer mucho para cambiar lo que me molesta.

Nunca me puedo quedar callada y eso hace que me corran de los lugares a los que voy.

Es difícil para mí hacer amigos y es difícil para mi, dejarlos ir cuando los tengo.

Cosas tan pequeñas y a menudo, irrelevantes para los demás, son las cosas que más amo. Escuchar el sonido de la lluvia, observar una puesta de sol, beber un chocolate caliente, mirar las interminables hectáreas de bosque alrededor de mi casa o inclusive, sentir el aire contra mi rostro… Ese tipo de cosas son las que me dan esperanza.

Solo puedo escribir, porque no tengo nada más.